Refuerzan el llamado al sector Silvoagropecuario para participar en el VIII Censo Agropecuario y Forestal

Bajo el lema “el campo cuenta” un total de 87 censistas recorren la región desde el pasado 10 de marzo, con el objetivo de recopilar datos estadísticos que permitan planificar estrategias y tomar decisiones más efectivas para el desarrollo regional del sector agrícola e impulsar el desarrollo rural en las comunas.

Labor que se extenderá hasta el próximo 10 de junio, fecha en la que se espera tener censados a todos los productores agrícolas, pecuarios y forestales de la región, en relación con su actividad durante el año agrícola 2020 – 2021, independiente del tamaño del predio o tipo de tenencia de la tierra.

Con el objetivo de dar cumplimiento e impulsar este operativo censal, que se desarrolla en plena pandemia, cumpliendo con la totalidad de exigencias planteadas por la autoridad sanitaria nacional, es que los Seremis de las carteras de Economía, Carlos Lillo y Agricultura, Rodrigo Órdenes, junto a la directora regional del Instituto Nacional de Estadística (INE), Marcela Puz, se sumaron al levantamiento de datos que se realizó esta semana en el sector de Pan de Azúcar, comuna de Coquimbo, para difundir la importancia de este proceso, definido cómo el más importante del agro chileno.

En la oportunidad visitaron al productor de hortalizas Mario Yáñez, quien luego de ser censado, valoró el desarrollo de este instrumento y el acercamiento de las autoridades con el mundo rural,“a nosotros nos gusta el acercamiento más directo, y ahora que viene el INE y saben lo que nosotros estamos produciendo y nos coloca en el mapa, gracias a esta encuesta, nos tiene muy contentos. De ese modo, podremos recibir apoyo por medio de las autoridades”, indicó.

La importancia de este censo radica principalmente en la actualización de datos y parámetros, con el fin de mejorar la toma de decisiones, considerando que el último levantamiento se realizó el año 2007, a esto se refirió el Seremi de Economía, Fomento y Turismo de la región, Carlos Lillo, indicando que “nuestra región se caracteriza por tener un fuerte sector agropecuario que es relevante para la economía regional. Por tanto, esta actualización de la información a través de este Censo va a permitir mejorar políticas públicas de este sector en la Región de Coquimbo”.

En tanto el Seremi de Agricultura, Rodrigo Órdenes, se refirió a este proceso destacando la necesidad que existe de contar con esta información, para generar un levantamiento de estrategias e instrumentos acorde a las desafíos que enfrente el sector agropecuario, “la ejecución del VIII Censo Agropecuario es muy importante para nuestro sector, ya que esta recopilación de datos nos permite actualizar información relevante, para la toma de decisiones, para la planificación y para la formulación de nuevas políticas públicas, con el objetivo de mejorar y crear nuevas herramientas que otorguen un desarrollo sustentable y sostenible, acorde a las actuales necesidades presentes en el mundo silvoagropecuario”.

Desde el Instituto Nacional de Estadística, en palabras de su directora regional, Marcela Puz, señalaron que la participación de todos los productores silvoagropecuarios es clave para que nuestra región esté bien representada en las estadísticas nacionales, “el levantamiento en terreno del Censo Nacional Agropecuario y Forestal lleva desde el 10 de marzo, por tanto, llevamos un poco más de mes y medio trabajando entre 87 censistas y supervisores que han estado desplegados por todo el territorio regional. En general, hemos tenido una buena recepción de los productos y productoras en el proceso. Hacemos el llamado a participar de este proceso, ya que el censo es una oportunidad para mostrar el valor de la actividad agrícola. Todos los datos son tratados con absoluta confidencialidad por la ley 17.374”

Con relación a la estructura de la cédula censal, esta consta de 280 preguntas agrupadas en 16 secciones. Las que serán aplicadas a todos los productores agrícolas, pecuarios y/o forestales del país de manera dinámica y acotada a la realidad de cada encuestado, en la búsqueda de recabar información enfocada a la superficie plantada, existencia animal, tipo de maquinaria utilizada, prácticas de manejo medio ambiental, número de trabajadores, sistema de agua de riego utilizada, entre otras.